martes, febrero 16, 2010


Otra pesadilla ¡menos mal! Sangre, sudor y semen me recuerdan que estoy viejo pero vivo.
Salto de la cama y estrujo con los pies las latas desparramadas por el suelo a modo de alfombra; las anillas unidas me sirven de cortina.
Abro una y ...¿a ver que hay de desayunar? una manilla de plátanos y la nevera repleta de cervezas que consigo como pago de mis publicaciones a un diario local...lo mejor será darme un baño ducha pero como vivo en una caravana cerca de la playa de la Zamora bajo los quinientos peldaños de acceso y me doy un chapuzón para quitarme los pegotes de humanidad y refrescarme.
Salgo desnudo del mar y cojo la bicicleta para que me seque el aire pero llegan las luces azules y me abducen.

@d0nE69

1 comentario:

Marie dijo...

Realmente me gusta tus escritos Maria :)